La risa y la sonrisa son innatas en el ser humano.

Nuestras primeras sonrisas se producen de forma refleja a las dos o tres semanas de vida y funcionan como una forma de comunicación espontánea del bebé con la madre.

La primera risa surge hacia los cinco meses de edad, también de forma involuntaria y como respuesta a estímulos que constituyen novedad o sorpresa.

Según los antropólogos es la clave en la socialización y el desarrollo.

Desde los 6 meses el bebé sonríe a los rostros que puede identificar

Siempre recordaré un curso de risoterapia que hice con una buena amiga, Pia Ladhenpera. Te puedo asegurar que eso de forzar la risa me costó, y mucho.
Los dos primeros intentos de empezar a reir, miré a mis compañeros desternillados y me fui abochornado al baño. A la tercera me oculté tras una columna pero a la cuarta me colocaron enfrente de otra persona y ya no me pude escapar.

Tras esos momentos en los cuales dije eso de “que coño hago yo aquí riéndome de nada”, asumí que la clase duraba 60 minutos, miré a mi reloj vi que las agujas no se movían y entonces dije “Paco, relájate y goza”.

Y efectivamente en ese momento entendí el significado del proceso. La mente se despejó, me dejé contagiar de la energía del grupo, empecé a fluir con los demás y se me contagió la risa. Al día siguiente… agujetas de tanto reír.

La risa en el trabajo es una de las alternativas que existen para combatir el estrés laboral. Un estudio realizado por la International Sociaty for Humor Studies (Sociedad Internacional de Estudios para el Humor) revela que los trabajadores que la practican alejan las situaciones complicadas y además tienen más capacidad de cambiar la perspectiva de la vida.

Además la risa aporta efectos secundarios muy interesantes como son:

• Mejora la productividad laboral.
• Refuerza tu sistema inmunitario. Se han realizado estudios y se ha encontrado que cuando una persona se ríe con frecuencia, aumenta la actividad de su sistema inmunológico, específicamente en la producción de Inmunoglobulinas A (IgA) e Inmunoglobulinas B (IgB) que son las células que de manera natural matan las células del organismo infectadas por virus y algunos tipos de células cancerígenas.
• Alivia tensiones musculares
• El cerebro libera serotonina, un tipo de endorfinas que tienen un efecto de tipo opiáceo con efectos calmantes y analgésicos. Por eso las endorfinas se conocen como «opiáceos naturales».

Al fin y al cabo es tu decisión, estar enfadad@ con todo el mundo o tener a la Risa como bandera, ¡¡es gratis y además saludable!!. (Lástima que no desgrave).

Un abrazo

Francisco López

Coach Certificado, Formador, Conferenciante

www.elpoderdelaAccion.com